Alcalde de Nueva York advierte sobre la presencia de "agitadores" por comparecencia de Trump
El alcalde de la ciudad de Nueva York, el demócrata Eric Adams, advirtió este lunes 3 de abril sobre la posible presencia de "algunos agitadores" por la comparecencia del expresidente republicano Donald Trump este martes ante un juez en Manhattan, donde le imputan cargos por el presunto pago de dinero a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels para comprar su silencio.
Adams pidió a los seguidores del exmandatario que "se controlen" y mencionó específicamente a la congresista ultraconservadora Marjorie Taylor-Brie, quien ha convocado a una manifestación frente al tribunal y a la que sindicó como "conocida por difundir desinformación y mensajes de odio".
"Mientras esté en la ciudad compórtense bien", conminó.
Un gran jurado inculpó la semana pasada al multimillonario de 76 años por delitos relacionados con el supuesto pago a Daniels durante la campaña electoral de 2016.
El exmandatario republicano, que ha lanzado su campaña para volver a la Casa Blanca en 2024, dejó este lunes al mediodía su mansión en la Florida de Mar-a-Lago para dirigirse a Nueva York, donde se espera que comparezca ante el tribunal.
"Iré a un tribunal, lo crean o no. ¡No se suponía que Estados Unidos fuera así!", escribió.
Ante la llegada de Trump, las calles más importantes de la ‘Gran Manzana’ han cambiado sus congestionadas vías por desolados sectores rodeados de barricadas y bloqueos por parte de la Policía de Nueva York.
El multitudinario operativo tiene en “alerta” a la fuerza pública ante cualquier eventualidad, por lo que un portavoz de la Policía aseguró que los agentes están “preparados para responder”.
Las medidas extremas de seguridad buscan evitar, entre otros sucesos, un estallido similar al del pasado 6 de enero de 2021, cuando miles de seguidores del mismo Donald Trump accedieron de forma violenta en el Capitolio de Washington D.C.
Ese día, que puso en entredicho la seguridad y la democracia en la unión americana, sigue en la mente de los estadounidenses como uno de los capítulos más oscuros de su historia política contemporánea.
Cinco muertos, decenas de detenidos, pánico y hasta millonarios daños dejó el asedio que sectores políticos aseguran que fue impulsado por el expresidente en su intento por desestimar la toma de posesión de su sucesor y actual mandatario, el demócrata Joe Biden.