Alemania decidió extraditar a Puigdemont por malversación y no por rebelión
La Audiencia territorial de Schleswig-Holstein decidió este jueves extraditar al expresidente de la Generalitat catalana Carles Puigdemont a España por un presunto delito de malversación de fondos. Sin embargo, no por un presunto delito de rebelión.
El tribunal indicó que no ve inconvenientes o impedimentos a la extradición de Puigdemont, pero no estableció fechas concretas para la operación, un proceso que deberá ejecutar la Fiscalía.
Además, decidió que Puigdemont no entrará en prisión preventiva, contrario a lo que pedía la Fiscalía, porque "siempre" ha cumplido con las obligaciones derivadas de su estado actual de libertad bajo fianza.
El tribunal consideró "no admisible" extraditar al líder independentista por rebelión, como pidió el juez Pablo Llarena del Tribunal Supremo español, y reiteró los argumentos ya expuestos en los que indicó que no se produjo el grado de violencia "suficiente".
Tampoco admitió el delito de perturbación del orden público, que también planteó la justicia española en caso de que no se admitiera finalmente el delito de rebelión.
Sin embargo, la Audiencia territorial de Schleswig-Holstein sí consideró "admisible" la petición de extradición por un presunto delito de malversación de fondos públicos relacionado con la organización del referendo del 1 de octubre, declarado ilegal por el Tribunal Constitucional español.
El tribunal aseguró en un escrito que Puigdemont pudo haber tenido una "corresponsabilidad" en decisiones que supusieron una carga para las arcas públicas, un extremo que, sin embargo, se deberá sustanciar en un juicio en España.
La Audiencia también descartó los argumentos de la defensa del líder independentista, que pedía no extraditarlo a España porque era un perseguido político y no tendría un juicio justo, según reportó la agencia de noticias Efe.
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