Así fue capturado Pedro Castillo tras decretar la disolución del Congreso peruano
Este miércoles, Pedro Castillo intentó disolver el Congreso para gobernar por decreto durante los próximos nueve meses, horas antes de que el Parlamento votara una moción de vacancia en su contra.
Horas después, pese a sus esfuerzos por mantenerse en el poder, el Parlamento peruano convocó a debate en el pleno para decidir su destitución.
Finalmente, la mayoría de los legisladores votaron a favor de la moción de vacancia y designaron a la primera vicepresidenta, Dina Boluarte, como nueva mandataria.
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Según informes policiales publicados por medios locales, el expresidente peruano, luego de anunciar el cierre del Congreso, intentaba huir hacia la embajada de México en Lima y presumían que podría abandonar el país y pedir asilo político.
Cerca de la 1:00 p. m. (hora local) salió por la parte trasera del Palacio Presidencial en compañía de su ex primer ministro Aníbal Torres y el personal de Seguridad del Estado de la Policía Nacional de Perú.
La indicación para los miembros del cuerpo de seguridad era clara: llegar de inmediato a la embajada mexicana por el trayecto más corto que podría durar aproximadamente 25 minutos.
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Sin embargo, una reunión que se estaba realizando en paralelo en la Comandancia General de la Policía Nacional frustró los planes de Castillo. El Alto Mando de la institución decidió no apoyar lo que consideraron como una interrupción constitucional, por lo que procedieron a su captura.
De inmediato, la Policía se dirigió a las embajadas de México y Cuba en Lima para impedir su ingreso. Sin embargo, los encargados de apresarlo fueron los mismos miembros de la seguridad del Estado que lo acompañaban.
El chofer recibió la orden y junto a otros miembros de la Policía Nacional lo capturaron y llevaron a sede de la Prefectura de Lima.