Autoridades de Ecuador dispersan con gases lacrimógenos a cientos de indígenas en Quito
La policía ecuatoriana dispersó este martes con gases lacrimógenos a unos 500 indígenas que bloquearon con ramas de árboles una importante avenida de Quito, en el noveno día de protestas contra el gobierno.
Miles de indígenas llegaron el lunes a la capital del país a reclamar una reducción en los precios del combustible, según AFP.
El grupo de unos 500 indígenas que chocó con la policía salió de su lugar de hospedaje en la Uiversidad Salesiana y pretendía llegar hasta la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE), que fue tomada por la policía en medio del estado de excepción que rige en seis de las 24 provincias del país, incluida Pichincha, cuya capital es Quito.
Para frenar su avance, policías antimotines lanzaron bombas lacrimógenas a los manifestantes, que con los ojos llorosos por el gas se dispersaron y luego volvieron a reagruparse.
La CCE ha sido tradicionalmente el lugar que acoge a indígenas que protestan contra los gobiernos de turno.
El jefe de las Fuerzas Armadas de Ecuador denunció el martes como una "grave amenaza" a la democracia la ola de protestas por el precio de los combustibles liderada por los indígenas, que ha provocado el estado de excepción en la región y el toque de queda en la capital, Quito.
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En el noveno día de protestas que han visto barricadas en las carreteras de todo el país, han costado a la economía decenas de millones de dólares y han dejado decenas de heridos, el ministro de Defensa, Luis Lara, advirtió que las fuerzas armadas "no permitirán intentos de romper el orden constitucional ni ninguna acción contra la democracia y las leyes de la república".
"La democracia ecuatoriana enfrenta una grave amenaza por la acción concertada de agitadores que impiden el libre tránsito de la mayoría de los ecuatorianos", acusó Lara, flanqueado por los jefes del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea.
El presidente Guillermo Lasso amplió el lunes el estado de excepción a seis de las 24 provincias del país, con el fin de frenar las manifestaciones.
La poderosa Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie) -a la que se atribuye la caída de tres presidentes entre 1997 y 2005- convocó las protestas en todo el país, mientras los ecuatorianos tienen cada vez más dificultades para llegar a fin de mes.
Los indígenas representan más de un millón de los 17,7 millones de habitantes de Ecuador, y a su movimiento se han sumado desde entonces estudiantes, trabajadores y otras personas que sienten la presión económica.
La policía dijo el lunes que 63 miembros de las fuerzas armadas han resultado heridos en los enfrentamientos y otros 21 han sido retenidos brevemente como rehenes desde que comenzaron las protestas, mientras que los observadores de derechos humanos informaron de 79 detenciones y 55 civiles heridos.