’Bacha Bazi’: Práctica pederasta disfrazada de tradición por los talibanes
La invasión de los talibanes en Afganistán ha traído de vuelta los recuerdos de cómo fueron sus años de gobierno hace dos décadas.
Es por esto que se ha puesto un foco de atención en personas que parecían olvidadas, como las mujeres y niñas.
Aunque éstas no son las únicas que se encuentran en peligro ante el régimen talibán. Se tiene conocimiento de una “tradición” que éstos practican poniendo en peligro la vida y la indemnidad sexual de los niños, especialmente los que poseen menos recursos.
La práctica es llamada ‘Bacha Bazi’ y es una violación a los derechos de los niños y abuso sexual, disfrazada de tradición en Afganistán.
Consiste en prostituir a cientos de niños entre personas poderosas solo para su entretenimiento.
Con la toma de poder de los talibanes se teme que esta “tradición” vuelva a tomar fuerza dentro del país.
Según el portal de RCN Noticias, un comandante talibán aseguró en un video haber abusado de 3.000 niños, en donde señala que la mayoría fueron vendidos por sus padres en una búsqueda desesperada por conseguir dinero.
Después que tienen a los menores bajo su poder, los ridiculizan vistiéndolos con ropa de mujer con el fin de que bailen para ellos, seguido a esto empieza su infierno, pues son sometidos a abusos sexuales.
Los hombres utilizan esta práctica pederasta para distraerse y mostrar su estatus, ya que es más común que los adinerados tengan acceso a esta “tradición”.
La ONG Save the Children expresó en un comunicado su profunda preocupación por la seguridad y el bienestar de estos niños.
"No hubo nunca un momento más importante que este para confirmar nuestra dedicación respecto del pueblo afgano, y nuestro compromiso en permanecer y trabajar en el país. Save the Children Afganistán no abandonará su trabajo, el personal o las comunidades que apoya desde 1976", declaró Christopher Nyamandi, director general de Save the Children Afganistán.
El portal de noticias Clarín de Argentina, reseñó que las víctimas, generalmente niños de entre 10 y 18 años procedentes de familias de clase baja, suelen ser contratados como aprendices o sirvientes en casas y negocios, a menudo por medio de amenazas o engaños, según un informe de AIHRC publicado en 2014.
En el informe citado por el Clarín se advierte que la mayoría de ellos "son utilizados como bailarines en bodas y después de que la fiesta finaliza son trasladados a un lugar en el que son violados por un hombre o algunos casos, por un grupo entero".