Corte Suprema de Estados Unidos emite dos fallos claves sobre educación y libertad de expresión
La Corte Suprema de Estados Unidos, de mayoría conservadora, emitió dos importantes fallos que estaban pendientes en el país desde hace tiempo.
En primera instancia, el alto tribunal bloqueó el programa del presidente Joe Biden que buscaba la condonación de los préstamos estudiantiles en EE. UU.
Con esta determinación, queda invalidada la iniciativa destinada a entregar hasta USD 20.000 de alivio a millones de prestatarios que luchan con deudas pendientes.
Según determinó la corte en una votación de seis votos contra tres, el Gobierno se extralimitó en sus funciones al adoptar este costoso programa sin autorización explícita del Congreso.
En ese contexto, el magistrado conservador John Roberts argumentó en nombre de la mayoría que la Administración del presidente Joe Biden “anuló unos 430.000 millones en préstamos federales, borrando por completo la deuda de 20 millones de prestatarios y rebajando la cantidad media adeudada por otros 23 millones, de 29.400 dólares a 13.600 dólares".
Además, señaló que entre "las competencias más importantes del Congreso está su control del monedero".
Ante esto, el presidente Biden indicó que está "fuertemente" en desacuerdo con el fallo del supremo. Una fuente cercana a la Casa Blanca indicó que el mandatario "dejará claro que aún no ha terminado de luchar".
El otro fallo del alto tribunal tiene que ver con una diseñadora de páginas web que se niega a crear sitios en línea para bodas homosexuales.
En este caso, la máxima instancia judicial dictaminó que las empresas que atienden al público y desempeñan actividades creativas pueden invocar la libertad de expresión para negarse a prestar un servicio contrario a sus valores.
"La gente es libre de pensar y expresar lo que quiera, no lo que el Gobierno le diga", argumentó el magistrado Neil Gorsuch bajo la Primera Enmienda de la Constitución.
Para la jueza Sonia Sotomayor, “el tribunal, por primera vez en su historia, concedió a un negocio abierto al público el derecho constitucional de negar el servicio" a personas protegidas por leyes antidiscriminación.
El fallo lo dictaminó el alto tribunal por una mayoría de seis jueces sobre nueve. En cuanto a esta determinación, el presidente Biden manifestó su preocupación ante la decisión que podría "dar lugar a una mayor discriminación contra los estadounidenses LGTBQI+".