Dorhean, el chico que parece haberse tragado la tierra en Caracas, cumple un mes perdido
La foto más reciente que se tiene de Dorhean fue una selfie que se tomó en el Parque del Este, el último día que su madre se comunicó con él. Llevaba una franela cuello tortuga negra y un pantalón blanco. A media tarde del lluvioso domingo 16 de octubre había estado buscando sin éxito la Sala Cabrujas y llamó a su madre Heidy.
Le informó que estaba perdido por Los Palos Grandes y ella le recomendó que buscara la avenida Francisco de Miranda y regresara a la casa. Pocas veces Dorhean visitaba el este de la capital, pero quería ver una obra pues era estudiante de artes escénicas.
Su madre cuenta a NTN24 que al pasar las horas comenzó a llamar al celular de Dorhean para ver por qué no había llegado, pero de inmediato sonaba la contestadora. Llamó a varios de sus amigos y uno de ellos le dijo que había hablado con Dorhean por teléfono y que le contó que había caminado hasta Parque del Este y que sentía que lo querían robar.
Esa misma noche Heidy, estudiante de enfermería, cuenta que salió a buscarlo por la zona, caminando de punta a punta el parque. No tuvo éxito y comenzó la pesadilla. Seguía sonando la contestadora en el celular de su hijo, quien casi nunca sale solo y “selecciona muy bien” a sus amigos.
Heidy solo maneja las redes para mantenerse informada y en contacto con su familia en el interior. Pero una amiga le sugirió que publicara en sus cuentas la foto de Dorhean con un número de teléfono para que quien lo haya visto le diera información. Es la foto selfie la que se ha hecho viral con su rostro. Pues está parado frente a una gran roca en Parque del Este donde ha estado su madre varias veces en el último mes, muy cerca de la entrada principal y del estacionamiento.
Aunque puso la denuncia en el CICPC no ha recibido respuesta. Solo le piden paciencia. Ella misma ha hecho sus pesquisas. Un vendedor ambulante de Parque del Este le dijo que lo recordaba y que había hecho un Pagomovil para pagar por un vaso de chicha.
“Algo pasó en Parque Miranda”, repite Heidy. “Él les dijo a sus amigos que parecía que lo querían robar, es lo último que supe de él, ese día yo me desesperé, llamaba y llamaba y salía apagado. Yo he estado en el lugar, recorrí el sitio donde estaba mi hijo, busqué a ver si había algún detalle, pero la lluvia no ayuda”.
Ha buscado en los hospitales de la Gran Caracas, viajó a La Guaira, a Guatire, pagó por entrar a ver los cadáveres en la Morgue de Bello Monte, ha visitado centros psiquiátricos, el albergue para chicos de la calle del Estado Negra Hipólita y en ningún lado ha encontrado pistas de Dorhean.
“Yo tengo la ilusión de que esté perdido o vagando”. Cuenta que varias personas la han llamado diciéndole que lo vieron por las calles de Chacao, pero nadie le da seguridad, no le envían fotos o no coincide con la vestimenta. Tiene duda hasta de los periodistas que la llaman y se reserva algunos detalles por recomendación de la policía.
Asegura que Dorhean no fuma ni tiene vicios. “Es mi muchacho, un muchacho de la casa” y el menor de tres hermanos.
“Alguien me lo tiene. Lo único que deseo es que aparezca mi hijo, humanamente hago una expedición al Guaire, al Ávila, me meto a los barrios, no sé, que me digan pero algo tengo que hacer”.
Dice que desde la desaparición de su hijo ha estado faltando al trabajo que tanto necesita. “Tengo que entregar un caso clínico y estoy luchando con mi mente para poderme concentrar, es una responsabilidad de mis pacientes, no es fácil”.
En días pasados llevó un documento ante la Fiscalía General en el centro de Caracas exigiendo que un funcionario se ocupe del caso pero tampoco tuvo respuesta. Solo le recomiendan que tenga paciencia y que “los chamos son así”, pero ella dice presentir lo peor. Está 24 horas pendiente del teléfono esperando una llamada alentadora.
Redacción NTN24