"Es un centro de tortura donde son víctimas de maltratos físicos y psicológicos": Tamara Sujú reveló los vejámenes a los que son sometidos los presos políticos en la cárcel de Tocuyito
Por medio de la campaña “Apadrina un preso político del mundo”, se busca que aquellas madrinas y padrinos, por medio de un arduo y constante trabajo, alcen la voz por la liberación de sus apadrinados, quienes se encuentran privados de la libertad de manera injusta y arbitraria, no solo en Venezuela, sino en diferentes territorios a nivel mundial donde la represión hace parte de las naciones no democráticas.
Ante esta iniciativa, que llena de esperanzas a familias en el mundo, el programa La Tarde de NTN24 habló con Tamara Sujú, quien es abogada de derechos humanos y líder de esta campaña, quien entregó cifras de esta iniciativa durante este 2025.
“De la campaña han sido aproximadamente liberados 54 ahijados; dentro de ellos, los nicaragüenses, cubanos liberados, aproximadamente son unos seis; dentro de ellos, José Daniel Ferrer; los bolivianos, la expresidenta Jeanine Añez, Luis Fernando Camacho, varios venezolanos, tres bielorrusos, cuatro iraníes”, indicó la también Directora Ejecutiva del instituto CASLA.
De acuerdo con Sujú, la finalidad de esta iniciativa es que “el padrino no suelte a su ahijado hasta que no sea liberado. Es el reto de que no se olviden de ellos”.
Respecto a la efectividad y presión que representa esta campaña, Tamara señaló que: “Tú pones el foco, no solo en la persona, sino que pones el foco en el país y en lo que está sucediendo y se va conociendo y reproduciendo”.
“Es muy importante porque les molesta cuando tú pones el foco en un rostro y pones a una persona importante, reconocida, a hablar de esa persona insistentemente. De hecho, es o ha surtido muchísimo efecto con los nicaragüenses”, añadió.
La abogada defensora de derechos humanos también habló sobre la denuncia que viene haciendo sobre los tratos inhumanos que enfrentan decenas de presos políticos en el penal de Tocuyito.
"La cárcel de Tocuyito es como la cárcel de Rodeo o la cárcel de Guaicaipuro. Son centros de tortura donde los presos políticos están siendo víctimas de maltratos físicos y psicológicos (…) Habría 200 detenidos que están en un lugar llamado El Cajón, una celda grande de tortura, donde caben aproximadamente 80 detenidos”, expresó Tamara Sujú.
Una situación deplorable y crítica para estos presos políticos que deben vivir hacinados en “celdas pequeñitas donde caben dos, tres personas. Es un lugar con unas luces blancas prendidas las 24 horas del día, donde hay una sola letrina para esa cantidad de personas, sin papel, sin agua, y sin drenaje", añadió.
Pero esto no es todo; de acuerdo con la abogada defensora de derechos humanos, aparte de esto, enfrentan enfermedades tanto físicas como psicológicas y, como si fuera poco, se ven sometidos a torturas como castigo.
“Las torturas de recibimiento que ejecuta el director de la cárcel, que se llama Juan López, y el ministro de asuntos penitenciarios, Julio García Cerpa (…) Después de que los golpean, los tiran en el piso y les caminan por encima del cuerpo y de la cabeza; les caminan como si fueran animales y los tienen tirados todo el día, la tarde en el patio y luego los llevan a El Cajón. Allí están aproximadamente entre 40 y 50 días desorientados, sin saber dónde están”, puntualizó.