Estados Unidos y Filipinas comienzan sus mayores ejercicios militares de los últimos años
Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos y Filipinas comenzaron este martes sus ejercicios militares conjuntos anuales en medio de la escalada de tensiones con Pekín en el mar de China Meridional y alrededor de Taiwán.
Los ejercicios denominados Balikatan reunirán a más de 17.000 efectivos, entre ellos 12.000 soldados estadounidenses y 5.000 filipinos y se celebrarán desde este martes hasta el próximo 27 de abril.
"A través de estos ejercicios, las fuerzas filipinas y estadounidenses perfeccionarán su interoperabilidad, aumentarán sus competencias y complementarán sus capacidades mediante la colaboración, garantizando que estén preparadas para responder juntas a los retos del mundo real", declaró el comandante de los Marines de EE. UU, Eric Austin, durante la ceremonia de apertura.
Los simulacros incluirán por primera vez fuego real con misiles Patriot y sistemas de defensa Avengers. Además se dispararán misiles HIMARS a un pesquero inutilizado en la provincia de Zambales, al noroeste del archipiélago y cercano al Bajo del Masinloc.
El despliegue se da luego de que China concluyera tres jornadas de maniobras militares alrededor de Taiwán, que considera como parte de su territorio, en protesta a una visita a Estados Unidos de la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen.
El “Balikatan” es el ejercicio más potente desde que estas maniobras fueron inauguradas hace 39 años y se trata de una de las modalidades de mayor amplitud entre los ejercicios existentes entre ambos países.
Dichas maniobras podrían ser uno de los últimos capítulos en la reforzada alianza militar entre Washington y Manila para "frenar las ambiciones expansionistas de China en el mar de China Meridional y en Taiwán".
Cabe destacar que Filipinas anunció la semana pasada las cuatro nuevas bases militares del archipiélago a las que tropas de Estados Unidos tendrán acceso, una de ellas en la parte más septentrional del archipiélago, a unos 400 kilómetros de Taiwán.
Ante el inicio de los ejercicios, el presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos, aseguró que China no debe inquietarse por la localización de las bases a las que EE. UU. tendrá acceso ya que, “si nadie nos ataca, no tienen que preocuparse porque no lanzaremos una ofensiva”. "Lo que hacemos es seguir reforzando la defensa de nuestro territorio", concluyó.