Gobierno de Joe Biden anuncia más cambios en el sistema de asilo del país
La administración de Joe Biden anunció este jueves más cambios en el sistema de asilo del país con el fin de acelerar el procesamiento y posible expulsión de los migrantes que continúan llegando a la frontera sur.
El objetivo del gobierno con este cambio es procesar en un plazo de seis meses a los migrantes que lleguen a la frontera a través del sistema de asilo, lo que cambiaría la demora de años que tomaría con el actual retraso en el sistema de asilo de la nación.
Esta medida aplicaría a aquellos migrantes que ingresen de forma irregular por la frontera sur de los Estados Unidos, sin niños y que se dirijan a Atlanta, Los Ángeles, Chicago, Nueva York y Boston.
“DHS pondrá a ciertos extranjeros adultos solteros hallados entre puertos fronterizos de la frontera sur en la lista de casos nuevos, repartidos en cinco áreas geográficas y los jueces de migración en el Departamento de Justicia priorizará estos casos”, indicó la administración Biden.
El Gobierno de Biden está tomando medidas cada vez más restrictivas para disuadir a las personas de viajar a la frontera entre México y Estados Unidos.
La recomendación de los abogados de migración es que los migrantes antes tengan sus casos definidos y estudiados antes de ingresar a los Estados Unidos.
“Es muy importante que las personas que realmente tienen casos de asilo estén preparadas en temas de pruebas para que puedan dar testimonios claros”, dijo Johanna Kelly, abogada de migración.
Hasta la fecha, existe un retraso récord de 3 millones de casos en el tribunal migratorio del país. El número promedio de casos asignados a un juez es de 5,000, y estos cambios no contribuirían a reducir su carga de trabajo.
Esto ocurre días después de que el gobierno de Joe Biden impuso este miércoles nuevas sanciones contra "la represión" del mandatario nicaragüense Daniel Ortega.
Estados Unidos acusó al régimen de participar directamente en el negocio ilícito de la migración irregular facilitando servicios aéreos para que migrantes puedan volar directamente a Nicaragua evitando cruzar la peligrosa selva del Darién.
“En particular, las acciones del gobierno de Nicaragua son motivo de grave preocupación. El presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo han implementado políticas migratorias permisivas por diseño que han introducido oportunidades para que las redes de tráfico y trata de migrantes los exploten con fines económicos”, indicó el Departamento de Estado.