Irán reconoce más de 300 muertos durante las protestas por la muerte de Mahsa Amini
Las autoridades de Irán reconocieron que más de 300 personas han muerto durante las protestas provocadas en el país tras la muerte de Mahsa Amini bajo custodia policial.
Desde mediados de septiembre pasado, el régimen islámico ha desplegado fuerzas de seguridad contra las manifestaciones que surgieron por el fallecimiento de la joven de 22 años después de ser arrestada por “violar el código de vestimenta iraní”.
A través de un video publicado por la agencia de noticias Mehr, Amirali Hajizadeh, general de brigada del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC), señaló que han habido “más de 300 mártires y personas muertas" entre ellos algunos de "los mejores hijos del país”.
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Este reporte oficial de víctimas incluye a las personas muertas en las manifestaciones, así como a decenas de policías, tropas y miembros de las fuerzas paramilitares Basij, que han perdido la vida en enfrentamientos con manifestantes o asesinados en otros lugares.
La reciente cifra se acerca un poco más al número de víctimas registrado por algunas organizaciones de derechos humanos radicadas en el extranjero.
Es el caso de Irán Human Rights que señala en su más reciente informe que al menos 448 personas han sido asesinadas por las fuerzas de seguridad en el marco de las protestas nacionales.
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La ONG asegura que su registro incluye a las personas fallecidas en la violencia relacionada con las protestas por la muerte de Amini y en diferentes altercados en la provincia suroriental de Sistán-Baluchistán, que limita con Pakistán y Afganistán.
Con motivo de las protestas, que han trascendido el ámbito internacional, Irán ha culpado a Estados Unidos, a potencias occidentales e Israel, así como a grupos de oposición kurdos de alentar los disturbios civiles en el país.