Maduro lanza polémica propuesta de reforma constitucional para cadena perpetua a corruptos
Aunque no ha comenzado oficialmente la campaña para las elecciones presidenciales del 28 de julio, Nicolás Maduro ha tomado acciones que, según analistas, avanzan con el objetivo de ganar votos en medio de la peor percepción popular que ha tenido el chavismo en toda su historia.
Además de detener y presentar en uniforme de recluso a su exaliado político, Tareck El Aissami, exministro de Petróleo acusado de formar parte de la mayor red de corrupción que haya admitido el régimen, Maduro propone el peor castigo para quienes se aprovechen de los recursos públicos.
El un acto este sábado para conmemorar el regreso de Chávez al poder tras el breve golpe de estado en 2002, Nicolás Maduro propuso hacer una reforma a la Constitución y aumentar a pena de por vida contra los corruptos.
Como si fuera ajeno al desvío de recursos que tienen a Venezuela sumida en crisis económica y deterioro de los servicios más elementales, Maduro se vende hoy como el paladín de la justicia e intenta mostrar asco por quienes se enriquecen con el dinero público.
“Es hora que los traidores, los vende patria, los corruptos que actúan burlando la ley, y creo que ha llegado la hora de una reforma constitucional para introducir nuestra constitución la pena de cadena perpetua para la corrupción de inhabilitación de por vida a la corrupción”, dijo Maduro en un acto en el centro de Caracas.
Lo dice días después de exponer a El Aissami, quien estuvo un año sin cargos ni acusaciones a pesar del bochornoso escándalo que admitió el chavismo y por el que se detuvo al menos a 30 personas cercanas al exministro.
La carrera astronómica de El Aissami solo perfila las poderosas mafias que siguen operando en Venezuela con el permiso de Maduro, quien se sostiene en el poder a toda costa, incluso a costa de sus más cercanos colaboradores.