Más de 60 soldados rusos murieron durante un bombardeo en el este de Ucrania

Al menos 63 soldados rusos perdieron la vida durante un ataque ejecutado por las tropas ucranianas en Makiivka, una localidad ocupada por Moscú en la región oriental de Donetsk.

Sin mencionar el número de muertos durante el ataque, el Ejército de Volodimir Zelenski reconoció este lunes haber bombardeado hasta 10 vehículos y un número indeterminado de militares en esta zona ocupada por Rusia.

A través de Facebook, el Estado Mayor ucraniano señaló que "el 31 de diciembre se destruyó o dañó hasta 10 unidades de equipamiento militar enemigo de varios tipos".

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Por su parte, el Ejército ruso, que normalmente no revela sus bajas durante un ataque, fue quien dio a conocer el total de decesos en esta arremetida ucraniana.

De acuerdo con el Ministerio de Defensa, se trató de un ataque con lanzacohetes HIMARS, un tipo de arma entregada por Estados Unidos a Ucrania. Además, la entidad estatal aseguró que sus fuerzas abatieron dos de los seis misiles.

Igor Konashenkov, portavoz del ministerio, indicó que "se está prestando toda la asistencia y el apoyo a las familias y los seres queridos de los militares muertos".

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Algunos medios rusos y ucranianos reportaron el domingo que el ataque ocurrió en la noche del sábado, golpeando un edificio donde había reservistas movilizados en Ucrania.

Una fuente anónima de las autoridades separatistas de Donetsk afirmó a la agencia rusa TASS, que el ataque se produjo luego de la utilización de teléfonos celulares por parte de los militares en la zona, lo que permitió que los ucranianos los geolocalizaran.