Los graves efectos del cambio climático han llevado a diferentes compañías a implementar procesos de producción más amigables con el ambiente.
Según la Organización de las Naciones Unidas las consecuencias de la emisión de gases de efecto invernadero en la atmósfera, procedentes principalmente del transporte y la industria, son factores que incrementan el número de personas expuestas a condiciones vulnerables y daños en los ecosistemas.
Por eso, cada día más organizaciones en América Latina implementan medidas para cambiar su forma de producción. La empresa Faber Castell en alianza con la organización WWF, logró obtener el sello del Consejo de Administración Forestal, gracias a su propia plantación de madera ambientalmente apropiada en Brasil y Colombia, para la elaboración de sus productos.
Redacción: CLÍ-MAX