En 2007, la empresa estadounidense Netflix comenzó a ofrecer un servicio que ha revolucionado por completo la industria del entretenimiento: El “streaming”. En sus inicios, pocos hubiesen pronosticado que este tipo de servicio se convertiría en una amenaza para las tradicionales empresas de medios que durante décadas habían liderado mercados globales. Pero hoy hasta gigantes como Disney han adoptado este modelo de negocio. De hecho, ya existen más de 200 plataformas de “streaming”. En este reportaje le revelamos quién gana y quién pierde en la batalla por atraer cada vez más ojos a las pantallas.