"No puedo imaginar la devastación que le tocó ver a mi hijo": familiares de soldados israelíes hablan de sus angustias en medio de la guerra contra Hamás
Las fuerzas de defensa de Israel afrontaron en las últimas horas uno de los peores momentos en su ofensiva contra Hamás, cuando 10 soldados murieron en una emboscada del grupo terrorista en el norte de la franja de Gaza lo que agudizó una nueva y tensa jornada de combates.
Desde la ofensiva del ejército israelí contra Hamás, han sido asesinados en total 110 soldados, mientras 1600 han resultado heridos.
El programa La Noche de NTN24 habló con familiares de algunos de los soldados del Ejército de defensa de Israel que combaten contra el terrorismo de Hamás.
Víctor Zajdenberg, exintegrante de la comisión directiva de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas, y quien, además, tiene tres sobrinos nietos combatiendo actualmente contra el grupo terrorista Hamás habló en NTN24.
“Gaza podría ser, con todo el dinero que ha recibido durante 15 años de Arabia Saudita, Estados Unidos, Europa y los Emiratos Árabes, con sus hermosas playas, una Dubai en pleno Mediterráneo y, sin embargo, han usado esos miles de millones de dólares para hacer una ciudad debajo de la ciudad. Con túneles en hospitales, casas privadas, es decir, son todos cómplices y han acompañado esta locura que ha organizado esta organización terrorista”, dijo Zajdenberg.
“Esta es una guerra de defensa contra la organización terrorista Hamás”, subrayó.
Jessica Souss es madre de un joven de 21 años que integra las filas del ejército israelí. Aseguró en el programa La Noche que la primera palabra que se le viene al pensar en su hijo es “angustia”.
“No puedo imaginar la devastación que le tocó ver a mi hijo y la angustia que eso me genera”, indicó.
En ese sentido, señaló que su hijo y miles de soldados “están combatiendo por la supervivencia de todo el pueblo de Israel”.
“Vivo con mucha preocupación y los chicos no pueden comunicarse con sus familias, y es muy escueta la información que recibimos”, agregó.