Ojo Bogotá: hurto de bicicletas tiene un nuevo modus operandi

En varias capitales y ciudades de Latinoamérica y el resto del mundo es muy común que la gente se transporte en bicicleta hacia sus trabajos, hogares, gimnasios, centros comerciales, entre otros puntos frecuentados.

En ocasiones, la bicicleta suple los colapsados sistemas de transporte de las metrópolis. De hecho, las autoridades habitualmente invitan a la población a tomar este medio (manejar bicicleta) para cuidar el medio ambiente y gozar de buena salud.

En el caso puntual de Bogotá, es sabido que la capital colombiana tiene una de las mejores infraestructuras (temporal y fija) para el uso de las bicicletas como medio de transporte.

Es por ello que, desde hace varios años, con diferentes alcaldías se le ha apuntado al mejoramiento de beneficios para estos artefactos viales. No obstante, con el paso del tiempo, organizaciones al margen de la ley han ganado terreno en cuanto al hurto de bicicletas.

Desde el robo a mano armada, bien sea con arma de fuego o con algún objeto punzo penetrante, hasta los métodos de estafa, están a la orden del día.

Ahora, una nueva práctica delictiva ha sido motivo de denuncia pública durante los últimos meses. Se trata de un nuevo método que los malhechores emplean para arrebatar las bicicletas a sus respectivos propietarios.

Modalidad de robo:

Delincuentes vestidos de “ciclistas”, entregando tarjetas con falsa publicidad y hablando de promociones de artículos para personas adentradas en el mundo FIT envuelven a quienes se interesan en dicha “campaña”, sobretodo a aquellos que montados en su bicicleta están ejercitándose o simplemente se transportan a su lugar de destino.

En ese contexto, estos asaltantes que portan indumentaria deportiva se presentan, saludan y estrechan las manos de sus víctimas, y es allí donde aprovechan para echar una sustancia que droga por unos minutos a las personas.

Posteriormente, los antisociales llevan a sus víctimas a un punto poco concurrido por los transeúntes y las despojan de sus pertenencias.

Entre los objetos que roban -billetera, celular, calzado costoso- se encuentra el principal, la bicicleta, en la mayoría de los casos de alta gama.

Cabe resaltar que las bicicletas rondan entre el millón de pesos y los siete millones seiscientos mil pesos colombianos ($7.600.000), unos 1.850 dólares aproximadamente.

Si bien las fuerzas del orden precisaron que hasta el mes de mayo del año en curso el hurto de bicicletas disminuyó 4% en comparación con el mismo período de 2022, los ciudadanos manifiestan que se requiere de mayor esfuerzo para frustrar esta actividad delincuencial.

Según reportan usuarios de redes sociales como Twitter y Facebook, Kennedy, Suba, Engativá, Fontibón y Bosa son las localidades más golpeadas por esta realidad que aqueja a la ciudadanía, dejando la preocupante cifra de 1.300 robos de bicicleta en lo que va de año.

Cabe recordar que el pasado año, de acuerdo con datos ofrecidos por la Secretaría Distrital de Seguridad, cerró con 6.980 casos de hurto de este medio de transporte, lo que se tradujo al robo de 23 bicicletas al día y alrededor de 1 cada hora.

Acciones que podrían ayudarlo a recuperar su bicicleta robada:

• De pronto aviso a la policía para que se pueda comenzar una búsqueda en la zona.
• Corra la voz en redes sociales.
• Visite (prudentemente) lugares en los que se suelen vender bicicletas de segunda mano (usadas).