Ola de violencia en Ecuador afecta el desarrollo de clases: 34 colegios se vieron obligados a implementar la virtualidad
La violencia no da tregua en Ecuador y los ciudadanos se mantienen en una constante zozobra por el alto nivel de delito que se registra cada día en el país.
Recientemente, la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado presentó un informe en el que la nación se ubica en el top 15 de los países con más criminalidad en el mundo.
Sin embargo, lo alarmante es el poco tiempo en el que la violencia ha escalado en la nación suramericana que en 2021 estaba en el puesto 35 de este listado y en solo dos años pasó al puesto 10.
De acuerdo con los datos del estudio, Ecuador está empatado con Siria y va detrás de Afganistán y el Líbano, que ocupan el puesto nueve del listado.
El incremento de los hechos violentos impacta en varias regiones del país, entre ellas el cantón Durán, en la Provincia del Guayas, donde el Ministerio de Educación tomó medidas similares a las de la pandemia del covid-19, pues activó clases a distancia y virtuales en 34 colegios de las 138 instituciones educativas en la región.
En ese contexto, 31 mil estudiantes están bajo la modalidad virtual, una medida que se extendió a zonas como Monte de Sinaí, en Guayaquil.
El programa Ángulo de NTN24 dialogó con María Bonilla, madre de familia; Johana Espín, doctora en sociología y experta en seguridad, y Carolina Mella, periodista del diario El País en Ecuador, quienes se refirieron a la preocupante situación.
Para María Bonilla, quien no reveló su rostro por cuestiones de seguridad, la situación ha escalado hasta el entorno escolar en donde los docentes han sido amenazados y extorsionados a cambio de no hacerle daño a los estudiantes.
“Muchos padres no enviábamos a los niños a las escuelas, es por eso que ella (la ministra de Educación) se ve obligada a tomar la medida de clases virtuales”, afirmó.
A su turno, Johana Espín calificó la medida de “extrema”, la cual deja serios cuestionamientos sobre las acciones del Estado frente a la violencia. “No se puede proteger la seguridad de los estudiantes dentro de los recintos educativos”, dijo.
La periodista Carolina Mella ve con preocupación la situación en el cantón Durán, que se ha convertido en una zona apetecida por las bandas criminales que hacen presencia en la zona.
“Es un lugar que se ha utilizado como bodega de la droga y la Policía no ha querido confirmarlo del todo, a pesar de que se han dado algunas evidencias de que incluso hay escuelas para reclutar a niños y jóvenes para convertirlos en sicarios”, afirmó.