Investigadores de la Universidad de Copenhague, Dinamarca, confirmaron a través de evaluaciones realizadas a pacientes que las temperaturas cada vez más altas en horas de la noche, retrasan la hora de acostarse a dormir y adelantan la hora de despertarse; lo que aumentaría la pérdida de un valioso tiempo de recuperación para el organismo humano. Además, los costos de sueño aumentarán a medida que lo hagan las abruptas elevaciones del clima, lo que podría significar entre 13 y 15 días más de sueño deficiente cada año hacia finales del siglo, agregaron.
En entrevista con Click Verde de NTN24, Sara Mednick, investigadora del sueño en la Universidad de California y autora del libro: ‘Toma una Siesta, cambia tu vida’, destacó que mientras la temperatura aumenta en el ambiente, el sueño de la gente disminuye.
Por ello, recomienda contar con un ambiente fresco para alcanzar las etapas de sueño profundo. "Como la temperatura ambiente se eleva hay mucha inequidad en términos de quienes duermen mejor o peor. Personas que no tienen aire acondicionado ni control de clima, que no tienen un ambiente positivo entonces dormirán mal; la gente adulta y también la de menos recursos duermen mal por causa del cambio climático".
Redacción Harriet Hidalgo.