¿Qué implicaciones tiene para Israel la reforma judicial planteada por el Gobierno de Netanyahu?
En la nación de Israel continúan las manifestaciones en contra de la reforma judicial planteada por el Gobierno del primer ministro, Benjamín Netanyahu.
Las protestas contra la polémica iniciativa, que busca otorgar más poder al Ejecutivo en detrimento de la justicia, ya llevan diez semanas en el país.
Por esta razón el presidente de Israel, Isaac Herzog, tuvo que dejar su papel protocolario e involucrarse en la crisis que atraviesa la nación y pedir al Gobierno que retire “para siempre” su propuesta y la reemplace por un texto de consenso que han ido esbozando varios académicos de distintas ideologías en los últimos días.
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El Gobierno de Netanyahu, que juró el cargo en diciembre, defiende su iniciativa como una forma de dar más poder a las instituciones democráticamente electas frente a un Supremo al que acusan de intervenir en demasía y con intencionalidad política.
El discurso de Herzog y el aumento de fuerza de los manifestantes se produce en medio de la expansión de la protesta al Ejército, que también ha pedido detener la reforma judicial a fin de “proteger al Estado de Israel”, y advierte de que no se quedará “de brazos cruzados” si acaba saliendo adelante, ya que “cambiaría el rostro del país”.
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Gabriel Ben-Tasgal, periodista y analista especializado en Oriente Medio, habló en el programa Cuestión de Poder sobre la situación actual del país.
“Las autoridades judiciales de Israel, por medio de jurisprudencia y de ideología, han acaparado poder que muchas veces la ley no le otorga (...) por ejemplo, el Supremo consideró que todo tema es judicial”, argumentó.