Sigue la incertidumbre en la cárcel ‘matadero humano’ de Siria: ordenaron nueva búsqueda de supuestos calabozos subterráneos
Tras la caída del régimen de Siria, que estuvo más de 50 años bajo la dictadura de la familia al-Asad, aires de cambio parecen fluir sobre el territorio de Medio Oriente.
No obstante, a pesar de la liberación de los presos de la cárcel Saydnaya, quienes pasaron años sufriendo torturas y todo tipo de violencia por parte del régimen, aún siguen los operativos en el centro de detención.
Esta cárcel fue calificada por muchos como un centro de torturas despiadadas, fue denominado por Amnistía Internacional como un "matadero humano", citando las miles de ejecuciones ocurridas en el sitio.
El pasado lunes equipos de rescate turcos empezaron la búsqueda de personas que podrían hallarse en celdas subterráneas de la cárcel.
Los rebeldes sirios que tomaron el poder el 8 de diciembre, tras una ofensiva relámpago, liberaron a miles de reclusos, algunos de ellos desde los años 80.
Temerosos y atónitos ante los hombres que vinieron a romper los cerrojos de sus celdas, decenas de presos salieron de la prisión siria después de años de infierno.
El complejo penitenciario fue registrado luego por socorristas sirios de los cascos blancos, que anunciaron el fin de las operaciones, sin hallar más detenidos.
Sin embargo, en las últimas horas la Agencia Turca de Gestión de Desastres inició el lunes, "a petición de las autoridades sirias", nuevas búsquedas de posibles calabozos subterráneos.
Participarán en la operación 120 rescatistas, que intentarán detectar con radares y equipos acústicos si hay sótanos hasta ahora sin descubrir.
Existen versiones de que el complejo podría tener varios niveles subterráneos, aunque la Asociación de detenidos y desaparecidos de Sednaya (ADMSP) considera que se trata de rumores infundados.
Según esa asociación, unas 4.000 personas fueron liberadas por los insurgentes.
A su vez, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), más de 100.000 personas murieron en cárceles y centros de detención sirios desde 2011.