Tres actos criminales que, en medio de la pandemia, preocupan a las autoridades en Colombia

En Arauca el flagelo del secuestro que sufre la Cabo Nubia Alejandra López Correa, Suboficial del Ejército de Colombia permanece 10 días en poder del grupo criminal ELN, su madre Olga Cecilia Correa le clama a este grupo terrorista para que le respete la vida y la regrese a su hija a su casa lo más pronto posible. 

Otro repudiable crimen de guerra ocurrió en zona rural del municipio de Murindo, Antioquia, donde una niña indígena de 16 años, que luego de llevar mes de haber sido reclutada por el ELN, fue obligada a instalar una mina antipersonal, con el infortunio que al manipular el artefacto se le explotó en las manos, haciéndole perder sus dos brazos y un ojo.

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Y el Departamento del Meta, volvió a ser foco del accionar violento de las disidencias de las Farc, que tras un ataque perpetrado contra un Comando de la Fuerza Omega dejó el doloroso saldo de seis militares muertos y otros ocho heridos. El Brigadier General Raúl Hernando Flórez, Comandante de la Fuerza de tarea Omega y el Gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, confirmaron que los responsables de estos lamentables hechos son disidentes de las Farc a la cabeza de alias 'Gentil Duarte' como respuesta al trabajo de la fuerza pública de evitar la expansión del narcotráfico en esta zona del país.

Redacción La Noche de NTN24