Trump emite contundente orden a la NASA con fecha en la que los astronautas deben llegar a la Luna
El presidente Donald Trump consagró el objetivo de Estados Unidos de volver a poner humanos en la Luna por medio de una amplia orden ejecutiva emitida este jueves en la que puso fecha al alunizaje de astronautas en la NASA.
Trump instó de esa manera a la agencia espacial estadounidense a regresar a la Luna en 2028 y defender el espacio de amenazas de armas, la primera medida importante en política espacial del segundo mandato de su administración.
La orden, emitida horas después de que el astronauta privado multimillonario y excliente de SpaceX, Jared Isaacman, asumiera como el decimoquinto administrador de la NASA, también reorganizó la política espacial nacional bajo el mando del principal asesor científico de Trump, Michael Kratsios.
En la práctica, canceló el Consejo Espacial Nacional de la Casa Blanca, un órgano de alto nivel de miembros del gabinete que el presidente revivió durante su primer mandato pero que consideró eliminar este año.
La orden, titulada "Garantizar la superioridad espacial estadounidense", pide al Pentágono y a las agencias de inteligencia estadounidenses crear una estrategia de seguridad espacial, insta a la eficiencia entre los contratistas privados y busca demostraciones de tecnologías de defensa contra misiles en el marco del programa Golden Dome de Trump.
Un alunizaje con astronautas en 2028 sería el primero de muchos planeados en el marco del programa Artemis de la NASA para establecer una presencia a largo plazo en la superficie lunar. Estados Unidos compite con China, que aspira a 2030 para su primer alunizaje tripulado.
La orden del jueves exige "el establecimiento de los elementos iniciales de un puesto avanzado lunar permanente para 2030", y refuerza el objetivo existente de la NASA de desarrollar bases a largo plazo con fuentes de energía nuclear.
Al comienzo de su segundo mandato, Trump había hablado repetidamente sobre enviar misiones a Marte mientras Elon Musk, importante donante que ha hecho del envío de humanos al Planeta Rojo una prioridad para su empresa SpaceX, cumplía un período como asesor cercano y poderoso zar de la eficiencia del gobierno.
Pero este año los legisladores del Congreso han vuelto a poner a la Luna en el foco, presionando al entonces candidato de la NASA, Isaacman, para que continuara con el programa lunar de la agencia en el que se han gastado miles de millones de dólares.
La Casa Blanca, en un esfuerzo por mejorar la eficiencia del gobierno liderado por Musk, recortó la fuerza laboral de la NASA en un 20% y ha buscado reducir el presupuesto de la agencia para 2026 en aproximadamente un 25% de sus 25 mil millones de dólares habituales, lo que arriesga programas de ciencia espacial que los científicos y algunos funcionarios consideran prioritarios.
Isaacman, quien planea dar su primer discurso a los empleados de la NASA el viernes, ha manifestado que cree que la agencia espacial debería tratar de apuntar tanto a la Luna como a Marte simultáneamente mientras prioriza un regreso lunar para vencer a China.
El objetivo de alunizaje de 2028 depende en gran medida del progreso del desarrollo del módulo de aterrizaje gigante Starship de SpaceX, que ha sido criticado por el exadministrador interino de la NASA por avanzar demasiado lento.