Trump vuelve a desafiar al sistema judicial y menciona una medida extrema: la Ley de Insurrección si bloquean los despliegues militares en EE.UU.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender la polémica al asegurar que considerará invocar la Ley de Insurrección, una medida extrema que le permitiría desplegar tropas estadounidenses dentro del país si los tribunales o los gobiernos locales bloquean sus órdenes.
El comentario se produjo tras los disturbios registrados en Chicago, donde Trump quiso enviar a la Guardia Nacional, pero la gobernadora del estado rechazó la medida.
Aun así, el expresidente insistió en enviar efectivos desde California o Texas, decisión que fue detenida por una orden judicial emitida por una jueza federal, irónicamente designada por él mismo.
Ante este revés, Trump lanzó una advertencia directa durante una rueda de prensa: “Si tuviera que promulgarla, lo haría. Si la gente estuviera siendo asesinada, y los tribunales o gobernadores nos estuvieran reteniendo, claro que lo haría”.
El exmandatario justificó su postura al afirmar que “la Ley de Insurrección existe por una razón”, recordando que este mecanismo se complementa con la Ley Posse Comitatus, que prohíbe el uso de las Fuerzas Armadas dentro del país salvo en circunstancias excepcionales.
La respuesta no tardó en llegar. El fiscal general de Oregón, Dan Rayfield, advirtió en entrevista con CNN que “las Fuerzas Armadas de Estados Unidos no pertenecen a nuestras calles, a menos que se trate de circunstancias extremas, y eso fue lo que determinó el juez”.
Asimismo, Rayfield lanzó un mensaje directo al expresidente: “¿Quiere ser creativo, señor presidente? Nosotros también seremos creativos y lo veremos en los tribunales”.