Venezolana asesinada en Trinidad y Tobago tenía tres meses de embarazo

Trinidad y Tobago

Venezolana asesinada en Trinidad y Tobago tenía tres meses de embarazo

FOTO: Cortesía
Según Smolansky, el presunto homicida es un cubano que trabaja para el régimen de Nicolás Maduro como funcionario de su embajada en Trinidad y Tobago

Este viernes, el Comisionado de la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos para la crisis de migrantes y refugiados venezolanos, David Smolansky, informó que una venezolana fue asesinada en Trinidad y Tobago.

Jhandrys Espinoza, una mujer de 32 años, emigró a Trinidad y Tobago y fue estrangulada hasta la muerte durante la noche del jueves.

Este domingo, Smolansky confirmó que la víctima tenía tres meses de embarazo,  y rechazó que hasta el momento, el régimen venezolano no se ha pronunciado al respecto.

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“Johandrys Salazar tenía 3 meses de embarazo cuando fue estrangulada. El presunto homicida sigue detenido. Mañana se hará la autopsia. El régimen sigue mudo, aún cuando el implicado es un cubano funcionario de la embajada en Trinidad. Otra atrocidad”, escribió Smolansky en Twitter. 

Múltiples organizaciones defensoras de los Derechos Humanos han denunciado una trama de trata de blancas y tráfico de personas desde Venezuela hacia las islas del Caribe.

-Xenofobia en Trinidad y Tobado- 

Lamentablemente, Trinidad y Tobago se ha convertido en una pesadilla para los venezolanos que emigran a ese país caribeño, donde muchos venezolanos han denunciado una política xenófoba por parte de las autoridades.

A mediados de agosto pasado, la modelo Stefany Flores fue violada y apuñalada por tres hombres que iban con ella en un taxi, debido a la salvaje agresión, a la joven de 19 años se le comprometió uno de sus ojos. Cabe destacar que uno de sus agresores, era un oficial de policía.

La violencia contra otra venezolano en el mismo país se volvió a repetir a finales de agosto, esta vez con menos suerte: Johanna Díaz Sánchez (32) fue reportada como desaparecida, y el 6 de septiembre su cuerpo fue encontrado en un pozo séptico en avanzado estado de descomposición. 

La expareja de Díaz, un hombre de 35 años, confesó el crimen tras ser interrogado por las autoridades. 

Tras el asesinato de Díaz, Smolansky urgió más acciones para prevenir los delitos de discriminación contra los venezolanos.


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