La vasco-venezolana Garbiñe Muguruza puso fin a su historia fantástica en el tenis
Con apenas cinco años ya manejaba una raqueta y veinticinco después, Garbiñe Muguruza decidió este sábado alejarse definitivamente de las canchas tras haber marcado su propia historia en el tenis.
"Ha llegado el momento de despedirme, ha sido una carrera larga, preciosa, pero siento que ha llegado el momento de retirarme", dijo Muguruza en una rueda de prensa con motivo de los premios Laureus, de la que es embajadora y que se entregan el lunes en Madrid.
"Es una decisión que he ido tomando poco a poco" desde que en enero de 2023, tras jugar en el torneo de Lyon decidió hacer un paréntesis para reflexionar tras una racha de malos resultados.
La reflexión se fue alargando hasta que decidió hacer definitivo su parón.
"Cada día que pasaba me sentía mejor y no echaba en falta la disciplina y la dificultad de la vida que llevaba", explicó Muguruza, que deja, con 30 años, una carrera plagada de éxitos, aunque no exenta de algún altibajo.
- "Resistir a las dudas" -
"Resistir a esos momentos de duda, de dificultad es de lo que más orgullosa me siento", añadió la extenista, hija de padre español y madre venezolana.
Nacida en Caracas, se trasladó muy joven con su familia a Barcelona y tanto ella como sus dos hermanos mayores recalaron en la academia de Sergi Bruguera.
En el centro de formación del dos veces ganador de Roland Garros, Muguruza inició una carrera que la llevaría a ganar diez títulos entre los que destacan Roland Garros en 2016 y Wimbledon en 2017.
También fue la primera española en lograr un título de 'maestra' en las WTA Finals de 2021, algo que no habían logrado nombres como Arantxa Sánchez Vicario o Conchita Martínez, quien sería su entrenadora durante un tiempo.
Su primer gran salto al circuito WTA tuvo lugar en 2012 cuando la española, entonces en el puesto 208 del ránking, recibió una invitación para jugar el torneo de Miami con 18 años.
Cayó en cuarta ronda, pero ahí se empezaron a ver las cualidades con un gran servicio y espectaculares golpes de fondo, entre otros.
"Era muy agresiva desde la línea de fondo, pero su transición a la red también fue muy buena", explicó Conchita Martínez a WTATennis.com.
"Al crecer en España, también era muy buena cambiando el ritmo y siendo capaz de defender y construir el punto desde la línea de fondo cuando tenía la oportunidad de avanzar", añadió la exentrenadora de Garbiñe.
- Wimbledon, el mejor recuerdo -
Dos años más tarde, ganó su primer título en el torneo WTA 250 de Hobart y en 2015 se impuso en el de Pekín.
Garbiñe llegó a su primera final de Grand Slam en 2015 en Wimbledon, donde cayó ante la estadounidense Serena Williams, de la que vengaría al año siguiente sobre la tierra batida de Roland Garros alzando su primer 'grande'.
En 2017, vuelve a llegar a la final de Wimbledon, donde esta vez se impondrá a la otra hermana Williams, Venus, con un recordado 7-5, 6-0, para hacerse con el título que parece le ha dejado un mejor recuerdo y que ninguna española había ganado desde Conchita Martínez en 1994.
"La final de Wimbledon es un momento único. Ganar la final de Wimbledon es... ¿cómo explicarlo?, la historia del tenis se formó en Wimbledon por decirlo de alguna forma, entonces ganar ese torneo... no hay más, es lo máximo que puedes conseguir", dijo Muguruza con una sonrisa este sábado.
La española sigue siendo la única jugadora que ha ganado tanto a Venus como a Serena Williams en una final de Grand Slam.
En septiembre de 2017, Muguruza alcanza el número uno del ránking, algo que no había vuelto a lograr ninguna española desde Arantxa Sánchez Vicario dieciocho años antes.
Tras un pequeño bajón, Muguruza volvió a resurgir en 2021 con victorias en Dubai, Chicago y las WTA Finals, que fueron su último título.
Acabó el año en la tercera posición del ránking, pero al año siguiente ya quedó fuera del Top 50 y tras un mal inicio de temporada 2023, Muguruza tomó distancias hasta finalmente dar por finalizada su carrera.
"No he vuelto a un partido", explicó este sábado la extenista, que se siente completamente satisfecha con su recorrido.
"Todos soñamos con ganar Grand Slams, ser número uno... He conseguido muchos de los sueños que tenía de niña, he hecho mi historia que ha sido fantástica", concluyó.