Análisis sobre las razones de la crisis política en Perú y los retos que enfrenta el nuevo presidente José Jerí
José Jerí, abogado limeño de 38 años, asumió el viernes como nuevo mandatario de Perú tras la destitución de Dina Boluarte por parte del Congreso.
Se convierte así en el séptimo presidente del país andino en apenas siete años, una cifra que refleja la profunda crisis política que atraviesa la nación.
En su primer discurso, prometió instalar "un gobierno de transición, de empatía y de reconciliación nacional" hasta las elecciones previstas para abril de 2026. Sin embargo, enfrenta grandes desafíos en un escenario marcado por la inestabilidad y la desconfianza ciudadana.
Entre las principales tareas del nuevo gobierno están combatir la inseguridad y la delincuencia, que han aumentado notablemente en los últimos meses.
También deberá conformar un gabinete de consenso y conducir al país hacia unas elecciones transparentes. Todo ello en medio de protestas de sectores opositores que cuestionan su legitimidad.
Al respecto, Carlos Cabanillas, analista político; Luis Roel, experto en Derecho Constitucional y Patricia Chirinos, congresista, hablaron sobre el cambio de presidente en Perú.
El analista político indicó que este hecho envía un mensaje de inestabilidad y crisis política al mundo.
"Esto viene porque hay un tema con las mayorías congresales, hay incapacidad para los gobiernos que entran de construir una mayoría que los sostenga en el poder", explica.
Agrega que se está evaluando incluso la posibilidad de transitar hacia un régimen más parlamentarista, dado que el actual sistema semipresidencialista peruano parece estar fallando.
Para el constitucionalista Luis Roel, la fragilidad del presidencialismo peruano se debe a que los últimos gobiernos no han logrado construir mayorías sólidas en el Congreso.
“Tendríamos que ver maneras en que quien asuma la presidencia tenga mayor posibilidad de tener mayoría parlamentaria", señaló.
Entre tanto, la congresista Patricia Chirinos, quien presentó la primera moción de vacancia contra el expresidente Pedro Castillo, argumenta que Boluarte demostró una "permanente incapacidad moral" para ejercer el cargo.
Chirinos criticó duramente la gestión de Boluarte, acusándola de estar "desconectada de la población peruana" y más preocupada por su imagen que por los problemas del país.