Brasil elige este domingo a su nuevo presidente entre Bolsonaro y Lula da Silva
Brasil llega este domingo 30 de octubre a la segunda vuelta presidencial después de una agresiva campaña entre el derechista Jair Bolsonaro y el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, una contienda política que ha polarizado al país suramericano.
Desde las 8 de la mañana (hora de Brasilia) de este domingo están abiertos los 460.000 centros de votación en los 5.568 municipios del país. A pesar de que Brasil cuenta con tres husos horarios diferentes, la jornada electoral estará regida bajo la hora de la capital, finalizando a las 5 de la tarde.
En cuanto al censo electoral, el Tribunal Superior Electoral (TSE) señaló que son 156.454.011 los brasileños habilitados para votar en los comicios del domingo.
El presidente Jair Bolsonaro acudió temprano a votar en la ciudad de Río de Janeiro y se mostró confiado en que saldrá "victorioso" en las elecciones frente a Lula da Silva.
"Si Dios quiere, saldremos victoriosos esta tarde. Mejor dicho: Brasil saldrá victorioso", dijo el mandatario a periodistas tras votar con una camiseta amarilla en el barrio Vila Militar, zona oeste de Río. "La expectativa es de victoria", añadió.
Por su parte, el exmandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva votó en la localidad de Sao Bernardo do Campo, a las afueras de Sao Paulo, donde afirmó que confía en que "la democracia vencerá" en la segunda vuelta de las presidenciales.
"Estoy convencido de que el pueblo brasileño votará un proyecto en que la democracia vencerá", dijo el izquierdista. Espero "que sea un día de paz", añadió tras emitir su voto.
Una campaña marcada por la polarización
Después de la primera vuelta, se cumplieron los pronósticos de los analistas, quienes advertían una campaña de “alto voltaje” de cara al balotaje. Pues en los últimos días han sido constantes los ataques e insultos en las redes sociales y la televisión, plagados de desinformación, ambiente que ha acaparado el debate público.
En el caso del bolsonarismo, la campaña del actual mandatario acusó a Lula de querer cerrar iglesias, promover la ideología de género en las escuelas y hasta de hacer un “pacto con el diablo”.
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Por su parte, la campaña lulista respondió a las declaraciones del equipo rival asociando al actual mandatario con pedofilia y canibalismo.
La carrera a la Presidencia de Brasil también estuvo marcada por los constantes cuestionamientos de Bolsonaro al sistema electoral electrónico, actitud que despertó la posibilidad de que el mandatario cuestione un resultado negativo para su candidatura.
Para algunos analistas como Felipe Nunes, profesor de la Universidad Federal de Minas Gerais, “es una elección histórica”, por lo que “difícilmente se volverá a ver una disputa con ese nivel de enfrentamiento, de polarización, entre dos líderes de masas que ya gobernaron el país y que llegan muy competitivos”.
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Lula da Silva, de 77 años, y quien se impuso en la primera vuelta con el 48% frente al 43% de Bolsonaro, de 67 años, mantiene una ventaja para la segunda vuelta del 53% de la intención de voto contra el 47%, según el Instituto Datafolha.
Tras la primera vuelta, los candidatos que quedaron en tercer y cuarto lugar, Simone Tebet y Ciro Guerra, respectivamente, decidieron apoyar al exmandatario izquierdista en este segundo round.
Redacción NTN24.com