El Salvador aprueba polémica reforma que permite la reelección presidencial indefinida y elimina la segunda vuelta electoral
El jueves la Asamblea Legislativa de El Salvador aprobó una polémica reforma constitucional para acabar con los límites al mandato presidencial y permitir que el actual líder Nayib Bukele, que goza de un apoyo abrumador de la mayoría en el parlamento, se postule indefinidamente.
La medida tuvo luz verde con facilidad: fue adoptada por los 57 partidarios de Bukele en la Asamblea Legislativa y votada en contra por sólo tres miembros de la oposición.
Dentro de la reforma también se contempla que el país permitirá la reelección "sin reservas", extenderá el mandato de cinco a seis años y eliminará la segunda vuelta en las elecciones.
“Gracias por hacer historia, compañeros diputados”, dijo el presidente de la Asamblea Legislativa Ernesto Castro, del partido gobernante Nuevas Ideas, tras el conteo de votos.
En contraste, la diputada opositora Marcela Villatoro, señaló: "hoy murió la democracia en El Salvador... Se quitaron las máscaras".
El autodenominado "dictador sereno" de 44 años ha sido presidente desde 2019. Fue reelegido en 2024 con una mayoría sin precedentes luego de otra jugada legal que le permitió, bajo permiso de la Corte Suprema, eludir una prohibición constitucional de mandatos sucesivos.
En ese entonces, Bukele logró el control de las instituciones estatales y del parlamento, que adoptó los cambios que la oposición tildó de antidemocráticos.
En otro movimiento, los legisladores también votaron para sincronizar las elecciones legislativas, presidenciales y municipales, y acortar el mandato presidencial actual en dos años a partir de 2029, con elecciones generales previstas para marzo de 2027.
Con las reformas constitucionales, Bukele podrá volver a postularse pese a las críticas de sus opositores.
Actualmente, el presidente Bukele goza de un enorme apoyo en su país por su enérgica campaña contra las bandas criminales, que ha reducido la violencia en el país a mínimos históricos, pero que también ha recibido señalamientos de grupos internacionales de derechos humanos por su agresiva campaña contra los pandilleros.
En las últimas semanas, además, gobierno también enfrenta acusaciones de represión contra activistas de derechos humanos y críticos del gobierno de Bukele, lo que ha obligado a decenas de periodistas y activistas al exilio.
En abril de 2024, el Parlamento aprobó una reforma para que los cambios constitucionales ya no requieran ratificación en otra sesión legislativa.
La política opositora Claudia Ortiz criticó la reforma como "un abuso de poder y una caricatura de la democracia".