Por qué la posibilidad de que Pietro Parolin sea papa genera tanta expectativa en Venezuela

El secretario de Estado de la Santa Sede, Pietro Parolin, conoce muy bien Venezuela, país en el que vivió entre 2009 y 2013, cuando fungió como Nuncio Apostólico.
El cardenal de 70 años, fue uno de los mediadores en el conflicto político que llevó a protestas masivas de calle en 2014, ese año y luego en 2016 intentó un plan de conversaciones que no tuvo ningún desenlace.
Tiene una amplia trayectoria en diplomacia y la gestión interna de la Iglesia, por su cercanía con el papa.
Siempre que vivió en Venezuela y luego de salir del país pidió una "solución interna, pacífica y democrática” al conflicto político.
En 2019 insistió en que seguía de cerca el conflicto de Venezuela. "La actitud de la Santa Sede es de neutralidad positiva, no es la actitud de quienes se sientan delante de la ventana y observan de manera casi indiferente. Es la actitud de estar sobre las partes para superar el conflicto".
En 2021 escribió una carta que fue leída por representantes eclesiásticos en una reunión entre el sector empresarial y la Vicepresidenta del régimen, Delcy Rodríguez.
Horas más tarde, Maduro cargó contra el obispo que “leyó una carta supuestamente de Pietro Parolin”. Dijo que la misma estaba cargada “de compendio de odios, de veneno, de rencillas, de casquillo, de cinismo, una carta verdaderamente llena de odio de desastre nacional. Dicen que él envió una carta, yo solo me pregunto, creo que no. Pietro Parolin tiene mucho trabajo en Roma”.
En noviembre de 2024 se reunió con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken y condenaron conjuntamente la represión en Venezuela y Nicaragua.
Días antes Parolin se había reunido con el presidente electo de Venezuela, Edmundo González, quien debió huir del país tras el robo de las elecciones del 28 de julio.
González aseguró que tuvieron “una conversación muy franca, muy afectuosa”.
“Nos dio todo su respaldo, el respaldo de la Iglesia católica en que se respete esa voluntad expresada el 28 de julio y su aspiración de que esto termine en buena lid, que termine sin traumas, sin violencia, con una suerte de compromiso con la verdad de lo que ocurrió”, dijo entonces González en una entrevista con el periodista César Miguel Rondón.
También en septiembre de 2024, dos meses después de las elecciones, fue el encargado de dar el discurso en la Asamblea de la ONU, en el que se refirió al pueblo venezolano “a pesar de los numerosos desafíos a los que se enfrenta… sigue confiando en los valores democráticos consagrados en la Constitución”.
Lamentó la crisis desatada después de las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio y transmitió el llamado de la Santa Sede que, “profundamente entristecida y preocupada”, pide a las autoridades “que respeten y protejan la vida, la dignidad, los derechos humanos y las libertades fundamentales de sus ciudadanos”.