Este 17 y 18 de julio, Bruselas funge como la sede de la Cumbre de la Unión Europea y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe, un encuentro que no se daba desde hace ocho años.
En esa línea, la reunión se centra en diferentes materias como la climática, económica y de seguridad.
Este lunes la UE y la Celac acordaron crear una Alianza Digital abierta a los 60 países que integran los dos bloques regionales para iniciar una cooperación en "una amplía gama de temas digitales, incluida la política digital".
La iniciativa fue firmada por la Alianza Digital UE-Celac, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.
Además, las organizaciones internacionales acordaron “profundizar su asociación mediante el establecimiento de La Alianza Digital UE-ALC basado en valores, abierto a todos los países de América Latina y a los Estados miembros de la UE”.
El “año de Latinoamérica”, así ha sido denominada la agenda económica y política trazada en Bruselas en la tercera cumbre de la Unión Europea y la CELAC; una cita "política” que corre el riesgo de quedar algo deslucida por diferencias en asuntos como la finalización del acuerdo comercial entre UE y Mercosur.
En tanto, la presencia de la vicepresidenta del régimen de Venezuela, Delcy Rodríguez, en la cumbre ha sido motivo de críticas por parte de la comunidad internacional. Recordemos que la funcionaria adjunta al oficialismo venezolano fue sancionada por la UE y no puede entrar en el espacio Schengen.
En diálogo con el programa Ángulo de NTN24, Jordi Cañas, eurodiputado y vicepresidente de la delegación en la Asamblea Parlamentaria Europea-Latinoamericana; Estefania Meléndez, experta sobre la influencia rusa en Latinoamérica; y Alberto León, experto en Relaciones Internacionales y Gobernanza Mundial, analizaron el rumbo que está tomando la cumbre de la Unión Europea y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe.